Bajo un intenso frío, una importante cantidad de personas se concentraron en la tarde del viernes frente al Municipio de Río Grande.
Allí referentes de iglesias evangelistas y católicas recriminaron el veto resuelto por parte del Intendente Gustavo Melella a la ordenanza aprobada por el Concejo Deliberante al adherir a la Ley Provincial que conmemora todos los 25 de marzo el Día de los Derechos del Niño Por Nacer.
Desde el propio Ejecutivo Municipal se adujo que dicho veto se llevó adelante a raíz de las controversias y reclamos que se llevaron adelante luego de que el Concejo aprobara dicha adhesión sin que se lleve adelante una discusión dentro del cuerpo deliberativo. Ante esta situación, Melella reconoció que este tipo de proyectos debe contar con una discusión entre todas las partes.